DÓNDE NACÍ

Byblos

ANTONIO TRABULSE KAIM (+)

Nací en el Bosque Sagrado de los Cedros,

Entre la apacible majestad de su ramaje

Y la magia de una historia milenaria.

Nací en Baalbek, la urbe del esplendor, la que veneró a Baal,

Llamada luego Heliópolis, la Ciudad del Sol,

Donde las piedras de sus templos unieron a Oriente y Occidente

Me engendraron en Biblos,

Una de las ciudades más antiguas de la Tierra,

Y soy hijo de la Navegación y el Alfabeto.

Llegué a la vida en Becharre, cuna de Gibrán Kahlil Gibrán,

En el interior del templo donde mora Astarté,

Siendo el fruto de su amor con Adonis.

Nací en Zahle, novia de la fértil planicie,

Y fui bautizado con el rocío de manantiales y riachuelos.

Una mujer fenicia bautizó con su nombre a un continente,

Era la Princesa Europa, hija del Rey de Tiro,

Me concibió con el amor de un dios, transformado en toro blanco,

Que la raptó mientras corría en las doradas playas de su ciudad-reino.

Nací a lo largo y ancho del litoral fenicio,

Durante la grandeza de Tiro, Sidón y Biblos.

Nací en las aulas de la Escuela Romana del Derecho

Fundada en Julia Augusta Felix Beritus,

la inmortal Beirut.

Nací con el mestizaje que se dio en Trípoli,

Como fruto maduro de árabes y cruzados.

Nací en las veredas de mi blanca serranía

Y fui depositado en las copas arboladas del verde del Chouf,

Cerca de Dair el Kamar y Beiteddine,

Moldeado por las manos fraternas

De musulmanes, drusos y cristianos

que entendieron la verdad de la identidad libanesa.

Y nací con la fragancia de los huertos que se respira en Jezzín,

Y el frescor de las cumbres nevadas de Dahr el Baidar.

Fui hijo del valor y la gallardía, porque vi luz en Zgharta,

En Ghazir, en Tula y Ehden.

Nací en la santidad de Bekakafra,

En la tranquilidad de Kartaba y el Batrún,

Y en la belleza de Duma y Hammana.

Nací cuando el cielo bendijo a Akkar

Y cubrió a Beit Melet con el velo de la fraternidad.

Nací con las lágrimas de Máshgara,

Que dieron plenitud a los caudales

Del más imprescindible de mis ríos: el Litani.

Nací en Kfarhouna,

Cuando la sureña dignidad de mis hijos,

Fue desposada con el heroísmo de un pueblo,

Concibiendo a un hijo que se llamó…Resistencia.

Soy una semilla llamada “Identidad Libanesa”

Sembrada en el fértil surco regado

Por la fe cristiana,

Con el orgullo druzo

y el alma extensa del islam.

¡Soy una nación llamada Líbano!

Concebida por la tolerancia y el amor,

La civilización y el dolor,

La fraternidad y el éxtasis.