YO SOY LÍBANO (PARTE 24)

mamelucos
LOS MAMELUCOS
ANTONIO TRABULSE KAIM (+)

 

Pero las invasiones a mi territorio continuaron llegando los mamelucos, cuyo nombre deriva del vocablo árabe Mamluk, que significa esclavo y que se aplicaba a los cautivos turcos, turcomanos o circasianos que formaron una casta para dominar Egipto. Este dominio permaneció 700 años con influencia política en la zona. En el siglo X, el sultán Najm-ed-din el Ayoub formó con ellos su guardia personal, pero en 1250 lo mataron para dar el poder a su líder Aybak. Surgen dos especies de custodios: la de los mamelucos bahríes, de 1250 a 1382, con mongoles y turcos, y la de los buryíes, mamelucos de origen circasiano de 1382 hasta el 1517, que eran circacanos del Cáucaso. Bahrí y buryíes derivan de los sitios en que acantonaron  las milicias que luego conquista el gobierno. La casta bahríe en 1250, abren la sucesión que produjo la conquista de tierras y el progreso egipcio. Luego del 1341 el mandato del sultán bahríe fue otorgado a la milicia, en el 1381, el primer gobernador buryíe llegó al trono. Su gobierno y el de sus herederos tuvieron luchas internas e invasiones, lo que trajo la derrota de Egipto por el sultán otomano Salim I. El poder turco que estaba en manos de un basha, pero el mando real lo ejercían los beys mamelucos, en distritos o provincias de menor grado. (Bey, título nobiliario otomano heredado en las tierras del Imperio).

Napoleón I dominó a Egipto y liquidó a los mamelucos en la Batalla de las Pirámides en julio de 1798. Los franceses evacuaron Egipto en 1801 y los mamelucos lucharon contra los otomanos perdiendo frente a Mehmet Alí y la lucha que se dio en el Cairo, en 1811 cuyo supervivientes escaparon a Nubia, al noreste de África, a ambos lados del valle del Río Nilo, entre Asuán, en Egipto y Jartum en Sudán.

El mongol Amir Tamir llamado Tamerlán I, un auténtico depredador y amante de la destrucción, por cierto descendiente de Gengis Khan, fue jefe del ejército tártaro que sitió a Damasco en 1401. Asiria, a Palestina y a mi territorio llegaban las temibles historias del amo del Turquestán, conquistador de Persia y Asia Central, que alcanzó a Moscú e India y sacrificó a Delhi. Analizando su crueldad y para impedir que inmolara a Damasco se enviaron mensajeros para discutir una tregua. Tamerlan exigió un alto rescate y lo obtuvo. Pero todo fue un engaño y la ciudad siria fue saqueada e incendiada. Sus domos sedujeron a Tamerlán I quien construyó réplicas en Samarkanda, su ciudad, que a la postre fueron un modelo para templos y palacios indios y para la arquitectura rusa.

Los domos del Taj Mahal y del Kremlin, son una remembranza de los damasquinos. Temerlán apreció el valor artístico de Damasco y llevó talladores, arquitectos y trabajadores del vidrio a siria. Trípoli se conservó como modelo de urbe islámica con el refinamiento medieval en sus monumentos.